Tercer trimestre de embarazo | ¡La recta final!
La verdad es que el tiempo pasa demasiado rápido y cuando te quieres dar cuenta ya estás en la recta final de tu embarazo. Los nervios se hacen más latentes. No solo por ver la carita de tu bebé, sino por la cercanía del parto. Si quieres saber qué esperar durante esta fase del periodo de gestación, esto es todo lo que necesitas saber sobre el tercer trimestre de embarazo.
Características del tercer trimestre de embarazo
El tercer trimestre de embarazo va desde la semana 27 hasta el final del periodo de gestación. Normalmente, en la semana 40. Durante esta etapa puede que te sientas bastante más incómoda que en ningún otro momento. Esto es debido a que el bebé está creciendo a un ritmo muy rápido, lo que implica:
- Dolores de espalda.
- Cansancio.
- Ganas de orinar.
- Ardores de estómago.
- Estreñimiento.
- Problemas para conciliar el sueño.
- Hinchazón en las extremidades, etc.
Al acercarse el parto tu cuerpo se va adaptando a la nueva situación que le espera. Tus músculos se estiran y el útero se agranda ejerciendo presión sobre la vejiga. Por este motivo, es importante durante el tercer trimestre del embarazo:
- Añadir más calcio y hierro a tu dieta.
- Aumentar el consumo de frutas y verduras para mantenerte hidratada.
- Vigilar la postura a la hora de caminar y agacharte.
- Dormir siempre que lo necesites.
- Evitar pasar demasiado tiempo de pie.
- Caminar siempre que puedas para mejorar la circulación.
- Tomar baños de agua caliente para aliviar los dolores.
Desarrollo del feto en el tercer trimestre
Durante la recta final del embarazo el feto seguirá experimentando cambios alucinantes. Cogerá más peso, abrirá los ojos y se irá preparando también para el día del parto. Así es el desarrollo fetal del último trimestre del embarazo:
- El sistema nervioso del bebé controla los movimientos respiratorios y la temperatura del feto.
- El bebé patalea y se estira dentro del útero materno.
- El cabello empieza a crecer y se forman los glóbulos rojos.
- Se empiezan a percibir las uñas de los pies del bebé, así como el lanugo.
- Las pupilas empiezan a cambiar de tamaño y el feto es capaz de detectar la luz.
- El aspecto de la piel se vuelve rosado y suave.
- La cabeza del bebé empieza a descender hacia la pelvis.
- El pecho del feto cada vez es más prominente. Y se empieza a acumular una capa de grasa por todo el cuerpo para que el bebé pueda mantener su temperatura tras el nacimiento.
- En la semana 40 de embarazo el feto puede llegar a pesar unos 3.4 kilos, aunque el peso de cada bebé es diferente al nacer.
No te preocupes si no cumples con tu fecha de parto. Es normal dar a luz tanto antes como después de lo previsto.