La hinchazón se hace evidente durante la última etapa de la gestación, y no siempre desaparece con la rapidez con la que desearías.  Pero no te preocupes, se puede reducir la retención de líquidos después del embarazo sin grandes esfuerzos.

Qué es y por qué se produce la retención de líquidos después del embarazo

Este problema se manifiesta en piernas y tobillos, que se hinchan y se sienten más pesados, sobre todo, hacia el final del día.

Hay dos causas principales para la retención de líquidos después del parto. La primera es la compresión a la que se ven sometidos los vasos sanguíneos de las piernas a causa del volumen que ocupa el bebé y que provoca que se acumule líquido en exceso. En segundo lugar, están los cambios hormonales.

Cómo reducir la retención de líquidos después del embarazo

Piensa que reducir la retención de líquidos después del embarazo no es más difícil que reducirla en cualquier otro momento de la vida. En realidad, algunas prácticas comunes y muy sencillas te ayudarán a aliviar la hinchazón de piernas y tobillos.

Bebe mucha agua

Una correcta hidratación siempre es recomendable. Puede parecer extraño que te recomendemos que bebas agua cuando lo que quieres es eliminar líquido, pero el hecho es que funciona. Si te cuesta beberla sola, prueba con infusiones o sopas, por ejemplo.

Cuanta menos sal tomes, mejor

Es de sobra sabido que la sal contribuye a aumentar la retención de líquidos. Así que es mejor que la retires de tu dieta. Evita la comida preparada y los aperitivos salados.

Cocinar en casa te permite controlar la composición de cada plato y contribuye a reducir la retención de líquidos después del embazado.

Mantén las piernas elevadas

Evita quedarte mucho tiempo sentada, de pie o con las piernas cruzadas. Intenta elevar las piernas por encima del corazón, por ejemplo, estirada con una almohada debajo de las rodillas o con las piernas apoyadas contra la pared.

También puedes darte suaves masajes en las piernas para mejorar el drenaje linfático.

Correcta alimentación

Debes alimentarte de forma saludable, incluyendo en tu dieta frutas y verduras variadas. Hay muchos alimentos diuréticos que pueden ayudarte a perder líquido y reducir el edema después del embarazo, como los alimentos ricos en agua (sandía, melón, rábano, etc.) o alimentos ricos en potasio (aguacate, yogur, plátano, etc...).

Si vas a tomar alguna infusión con efecto diurético y estás dando el pecho, puedes consultar si los ingredientes son compatibles con la lactancia en la página web: http://www.e-lactancia.org/