Cesárea programada
En la cesárea programada el ginecólogo fija una fecha para la intervención. No hay por qué preocuparse si te han programado una cesárea, es una intervención muy segura. Te contamos todo lo que debes saber para ir tranquila y preparada.
Cesárea paso a paso
Gracias a los avances en medicina, actualmente la cesárea es una intervención rápida y segura.
No obstante, no deja de ser una intervención quirúrgica, por lo que no debemos obviar sus riesgos. Vamos a explicar como se desarrolla la cesárea paso a paso:
- Se suministra la anestesia epidural: así evitan el dolor a la madre pero a la vez puede ser partícipe del parto.
- Se rasura el pubis (si se considera necesario).
- El personal sanitario coloca una sábana a modo de ventanilla para que la madre no vea el proceso quirúrgico, pues podría resultar desagradable (especialmente por la sangre).
- Se desinfecta la zona y se comienzan a realizar cortes de las diferentes capas hasta llegar al útero.
- Al romper la bolsa, se extrae al bebé. En este momento, es posible que retire la sábana para que la madre pueda ver al bebé.
- Se acerca el bebé a la madre para que pueda verlo.
- Se extrae la placenta.
- Se cierran las incisiones con puntos de sutura o grapas.
La intervención dura alrededor de una hora, contando unos 15-20 minutos para la intervención y unos 30-40 minutos más para cerrar el útero y el abdomen.
Riesgos
Los avances médicos han permitido que hoy en día la cesárea sea una intervención segura pero esto no significa que no comporte riesgos. De hecho, el parto por cesárea comporta más riesgo que el parto vaginal.
En la madre pueden darse:
- Hemorragias y coágulos de sangre.
- Dolor tras el parto.
- Fiebre puerperal (fiebre tras el parto)
- Aparición de seroma. Un seroma es una acumulación de líquidos corporales en zonas donde se ha producido una cirugía. Se trata de una complicación benigna que suele resolverse sola.
- Mayor probabilidad de sufrir complicaciones en futuros embarazos, como placenta previa por ejemplo.
En el bebé, los riesgos pueden ser:
- Problemas respiratorios cuando la cesárea se hace antes de las 39 semanas.
- Broncoaspiración del líquido amniótico.
- Cortes con el bisturí.
Además, la estancia en el hospital y la recuperación de la cesárea son más largas y complicadas que en el caso del parto vaginal.